El jefe de Amazon, Andy Jassy, ha admitido por primera vez que el creciente uso de la inteligencia artificial (IA) llevará a recortes de empleo en la empresa a medio plazo. En un memo interno, Jassy advirtió al personal que la empresa necesitará "menos personas para algunas tareas que hoy aún se realizan manualmente" en los próximos años.
Amazon ya está utilizando ampliamente la IA en la logística para reducir costos y acelerar procesos, según continuó Jassy. Los más afectados son los llamados "corporate workforce", es decir, los empleados de cuello blanco en la empresa. Al mismo tiempo, enfatizó que simultáneamente están surgiendo nuevos roles cuyo alcance no se puede estimar actualmente.
La iniciativa llega en un momento en que los inversores exigen cada vez más que Amazon entregue rendimientos concretos de su enorme ofensiva de IA. La empresa ha anunciado inversiones de alrededor de 100 mil millones de dólares para el año fiscal en curso, la mayor parte de los cuales se destinará a la expansión de la infraestructura de IA, especialmente para la división en la nube Amazon Web Services (AWS).
Der Druck steigt: Der Aktienkurs von Amazon liegt seit Jahresbeginn rund 2,5 Prozent im Minus. Hinzu kommen geopolitische Risiken – insbesondere durch die unberechenbare Handelspolitik der Trump-Regierung –, die das internationale Geschäft belasten.
El año pasado, Jassy ya había iniciado amplias reformas estructurales para reducir los niveles jerárquicos y aumentar la velocidad de las decisiones. En 2023 se eliminaron un total de 27.000 puestos en dos fases, a principios de 2024 siguieron más recortes en AWS. El paso actual marca ahora una reorientación estratégica, donde la eficiencia se antepone a la seguridad del empleo.
Brisante es sobre todo la forma abierta de tratar el tema. Mientras que muchos competidores tecnológicos como Microsoft aún enfatizan públicamente que la IA principalmente aporta ganancias de eficiencia, Amazon habla claramente por primera vez. Microsoft había despedido en mayo a alrededor del 3 por ciento de su personal, sobre todo desarrolladores de software, sin establecer una conexión directa con la IA.
Sin embargo, es notable que el jefe de Microsoft, Satya Nadella, admitió recientemente que entre el 20 y el 30 por ciento del código en algunos proyectos ya se genera automáticamente, un desarrollo que cuestiona toda la autoimagen de los trabajadores del conocimiento en la industria tecnológica.