Mientras el sector de moda del conglomerado de lujo francés Kering sufre caídas en las ventas, otro área crece constantemente: la joyería. Con una colaboración inédita entre Pomellato y Gucci, el grupo ahora apuesta decididamente por este segmento, considerado recientemente como la fuente de ingresos más estable.
La colección conjunta llamada Monili une los icónicos eslabones de cadena de Pomellato con elementos de cuero de Gucci, un homenaje a la herencia ecuestre compartida de ambas marcas y al estilo Jet-Set de los años 70. La línea de alto precio pretende tanto fidelizar a los clientes existentes como atraer a nuevos públicos, señalando que Kering quiere aprovechar más las sinergias internas.
Denn während die Gesamtumsätze des Konzerns seit 2022 zweistellig gefallen sind und die Aktie in drei Jahren mehr als 60 % eingebüßt hat, konnte die Schmuckabteilung seit 2014 ihren Umsatz vervierfachen. Besonders Boucheron gilt als Zugpferd: Mit einem Jahresumsatz von 459 Mio. Euro und 8 % Wachstum übertraf die Marke zuletzt deutlich Pomellato (329 Mio. Euro).
También estratégicamente, la iniciativa llega en el momento adecuado. Con Luca de Meo, Kering nombró en junio por primera vez a un CEO fuera de la familia Pinault. En Gucci, Demna Gvasalia asumió el liderazgo creativo en primavera. En esta fase de transición, las colecciones cápsula como Monili ofrecen, según el experto en moda Achim Berg, un "puente tácticamente sensato" para fortalecer la lealtad a la marca y la visibilidad.
Experimentos creativos como la serie Carte Blanche de Boucheron subrayan la aspiración de diseño: los jarrones se convierten en objetos de joyería modulares, fabricados mediante impresión 3D y materiales inusuales como el vidrio de borosilicato, resina a base de plantas o Vantablack, la sustancia más absorbente de luz del mundo.
„Unsere Kunden überraschen uns regelmäßig mit ihrer Offenheit“, sagt CEO Hélène Poulit-Duquesne. Die Experimentierfreude zahlt sich aus: Boucheron hat sich bei Kunstsammlern etabliert – und gibt damit ein Modell vor, dem Pomellato und Gucci nun zu folgen versuchen. In einem Umfeld, in dem Edelsteine knapper und Modezyklen kürzer werden, setzt Kering klar auf Differenzierung durch Design.
