Apple se enfrenta a dos propuestas controvertidas de accionistas en su asamblea general anual de este año. Una iniciativa del think tank conservador National Center for Public Policy Research (NCPPR) exige detener los programas de diversidad e inclusión (DEI). La segunda queja apunta a un control más riguroso de la inteligencia artificial de Apple, específicamente en la alianza con OpenAI. Ambas iniciativas reflejan la presión reciente de sectores conservadores que cuestionan las políticas empresariales tras la victoria electoral de Donald Trump.
El NCPPR presiona para acabar con el "Supplier Diversity Program" de Apple y critica la existencia de un Vicepresidente de Inclusión y Diversidad. El grupo argumenta que decisiones judiciales de EE.UU. sobre normativas DEI plantean nuevos riesgos de responsabilidad. Apple rechaza categóricamente la propuesta: "La propuesta restringe indebidamente nuestras decisiones internas", dice en una declaración. Se espera que grandes inversores como Vanguard y BlackRock utilicen sus participaciones contra la iniciativa crítica de DEI.
Al mismo tiempo, el National Legal and Policy Center se queja de la cooperación de Apple con OpenAI. Las preocupaciones se centran en posibles violaciones de privacidad o derechos de autor al utilizar IA generativa. Sin embargo, Apple señala que OpenAI es un producto independiente que no integra directamente servicios centrales de Apple. Preocupaciones similares se expresaron recientemente sobre Microsoft, pero no consiguieron mayoría. Aun así, el debate sobre la regulación de IA y cuestiones de responsabilidad podría poner a la empresa bajo presión para justificarse a largo plazo.
El fabricante del iPhone se considera actualmente como una de las pocas empresas tecnológicas que no ha reducido drásticamente sus actividades de DEI. Compañías como Meta, Google y Walmart han abandonado partes de sus iniciativas de igualdad debido a la presión de Trump. El ejemplo de Costco, donde los inversores rechazaron un intento similar, muestra que a pesar de las votaciones fallidas, es probable que haya oposición política.
Apple está negociando actualmente con la Casa Blanca sobre cuestiones regulatorias en el extranjero; al mismo tiempo, se enfrenta a desafíos en la disputa sobre DEI y el endurecimiento de la política comercial estadounidense hacia China. Observadores de la industria como Jamie Bonham de NEI Investments consideran que las críticas a Apple son exageradas, ya que la empresa rara vez ha estado involucrada en escándalos de datos o IA. Sin embargo, la gran empresa podría verse obligada a seguir explicando sus políticas y asociaciones debido a confrontaciones como esta.