El fabricante chino de automóviles eléctricos BYD ha criticado duramente el nuevo programa de subsidios para vehículos eléctricos del Reino Unido y, al mismo tiempo, ha anunciado su intención de expandir significativamente su presencia en el Reino Unido. Según la gerente de BYD, Stella Li, se crearán más de 5.000 puestos de trabajo en el comercio minorista británico para el próximo año.
Las críticas se dirigen contra el recientemente anunciado paquete de subvenciones de 650 millones de libras para fomentar la compra de coches eléctricos. La cantidad de la subvención depende de la huella de carbono de la producción. Los vehículos fabricados en China quedan así en gran medida excluidos. "Esta subvención suena como una ventaja para algunas empresas, pero actúa como una droga. Quien la elimine más tarde sufrirá las consecuencias", dijo Li en una entrevista con el Financial Times.
Los compradores de vehículos especialmente "verdes" pueden recibir hasta 3,750 libras de apoyo, mientras que para modelos con menor eficiencia de CO₂ se prevén hasta 1,500 libras. Sin embargo, BYD no cree que las medidas afecten sustancialmente sus ventas. Más bien, considera que la estrategia de Londres no es sostenible a largo plazo. "Ningún gobierno europeo podrá permitirse competir contra los autos chinos de forma permanente", dijo Alfredo Altavilla, asesor especial para el negocio de BYD en Europa.
Según Schmidt Automotive Research, la cuota de mercado de las marcas chinas de coches eléctricos, encabezada por BYD, es actualmente de alrededor del cinco por ciento en el Reino Unido y la UE. BYD, mientras tanto, apuesta por una mayor expansión: además de sus propias fábricas en Hungría y Turquía, la empresa planea abrir unos 2.000 puntos de venta al por menor en Europa, de los cuales unos 280 estarán en el Reino Unido. Cada ubicación venderá exclusivamente modelos de BYD y empleará a unas 20 personas.
El enfoque de Gran Bretaña difiere del de Bruselas: Mientras la UE ha impuesto aranceles de hasta el 45 por ciento a los fabricantes chinos, Londres prefiere las barreras indirectas del mercado a través del modelo de subvenciones.
Para los competidores europeos, la presión de los precios por parte de China sigue siendo notable. Marcas como Leapmotor, respaldadas por Stellantis, han reducido recientemente sus precios para beneficiarse de los nuevos subsidios en el Reino Unido. Mientras tanto, la embajada china en Londres advirtió sobre las "medidas proteccionistas" del gobierno británico.
Parallel dazu hat BYD einen Sponsoringvertrag mit Inter Mailand geschlossen. Neben dem Trikotaufdruck wird der chinesische Konzern dem Fußballklub rund 70 Fahrzeuge für Mannschaft und Management zur Verfügung stellen.
„Mein Traum ist, dass in fünf Jahren jeder im Supermarkt weiß: BYD, eso es una empresa de alta tecnología“, dice Li.