La agencia británica de crédito a la exportación UK Export Finance (UKEF) ha encargado al bufete de derechos humanos Beyond Human Rights Compliance una auditoría independiente del proyecto de GNL de TotalEnergies en Mozambique. El proyecto tiene un volumen de 20.000 millones de dólares y fue interrumpido en 2021 tras un atentado terrorista.
Según cuatro personas familiarizadas con el asunto, el bufete dirigido por el renombrado abogado Wayne Jordash KC está investigando especialmente acusaciones contra soldados mozambiqueños que aseguran el proyecto de gas. Se centran en informes sobre torturas, asesinatos y detenciones arbitrarias, incluso en contenedores de barcos. Según declaraciones del gobierno británico, también se está evaluando qué medidas preventivas contra violaciones de derechos humanos se han implementado hasta ahora.
Un informe de Politico había aumentado la presión sobre las autoridades británicas. Según este, las fuerzas de seguridad locales supuestamente ejercieron sistemáticamente violencia contra civiles en los alrededores del sitio de GNL. TotalEnergies y el consorcio operador declararon hasta ahora no haber encontrado pruebas sólidas de estos incidentes. Al mismo tiempo, se están llevando a cabo investigaciones propias en Mozambique, y también la comisión nacional de derechos humanos está examinando las acusaciones.
La investigación es políticamente muy delicada. En 2020, el Reino Unido prometió préstamos y garantías por valor de 1,15 mil millones de dólares estadounidenses. Sin embargo, desde el cambio de gobierno a favor del Partido Laborista, la política energética fósil está bajo revisión fundamental. Una retirada del proyecto podría tener consecuencias legales: el CEO de TotalEnergies, Patrick Pouyanné, declaró en febrero su intención de agotar todos los recursos legales en caso de incumplimiento de contrato.
Un posible cuello de botella financiero podría cubrirse al menos parcialmente con recursos propios del grupo. El US-Exim-Bank ya había liberado fondos por casi cinco mil millones de dólares en la primavera. Si UKEF seguirá el ejemplo y cuándo lo hará, sigue siendo incierto. Los registros internos muestran al menos un pago de alrededor de 35,000 libras a Beyond Human Rights Compliance en abril, propósito: "asesoría de proyectos".
Las cuestiones de seguridad no son decisivas solo para el consorcio TotalEnergies. ExxonMobil también planea un proyecto de gas en la misma región. El gobierno de Mozambique ahora confía en las tropas ruandesas para estabilizar la situación. Sin embargo, las perspectivas de seguridad duradera siguen siendo inciertas y podrían convertirse en una prueba para la financiación internacional de proyectos bajo el mandato ESG.
