Con una valoración de alrededor de 12.000 millones de euros, la startup alemana de tecnología de defensa Helsing se convierte en una de las cinco empresas tecnológicas privadas más valiosas de Europa. Una nueva ronda de financiación de 600 millones de euros, liderada por el fundador de Spotify, Daniel Ek, y su sociedad de inversión Prima Materia, convierte definitivamente a la empresa muniquesa en un peso pesado de la industria armamentística europea.

La ampliación de capital se lleva a cabo menos de un año después de una ronda de financiación anterior de 450 millones de euros y eleva el volumen total de fondos recaudados a 1,37 mil millones de euros. Además de Prima Materia, también participaron inversores existentes como el consorcio de defensa sueco Saab y los capitalistas de riesgo Lightspeed Ventures, Accel, Plural y General Catalyst.

Helsing fue fundada en 2021 por el exasesor de la Bundeswehr, Gundbert Scherf, el investigador de IA Niklas Köhler y el empresario de videojuegos Torsten Reil. Originalmente especializada en soluciones de software basadas en IA, ahora la empresa también desarrolla sus propios drones, aviones de combate autónomos y submarinos de vigilancia. Según Ek, el cambio a un modelo de "software y hardware de IA" marca un punto de inflexión: "Hemos llegado a un punto crucial: el campo de batalla del futuro será definido por la inteligencia artificial, la masa y la autonomía".

Helsing ya entrega miles de drones de combate a Ucrania y mantiene contratos con Alemania, Suecia y Reino Unido. Recientemente, la compañía probó con éxito un sistema de combate aéreo autónomo que controlaba un caza Saab. Paralelamente, trabaja con la empresa francesa de IA Mistral en el desarrollo de sus algoritmos de decisión. Sin embargo, una cooperación anunciada en 2022 con Rheinmetall ha sido disuelta.

El contexto geopolítico, especialmente la guerra en Ucrania, aceleró según Ek la captación de capital: «El mundo está siendo desafiado actualmente en muchos niveles. Esto ha adelantado el cronograma de manera masiva». Aunque Ek espera críticas públicas a su compromiso, se muestra tranquilo: «Estoy cien por ciento convencido de que este es el paso correcto para Europa».