ASML juega un papel crucial en la producción de chips de alto rendimiento, esenciales para la implementación de la Inteligencia Artificial (IA). La acción de la empresa neerlandesa está en niveles récord y las opiniones de los analistas sobre el futuro de la acción están divididas.

Sin las máquinas de ASML, fabricantes de chips como Nvidia no podrían alcanzar nuevos récords de ingresos y beneficios. La empresa es el líder fabricante de lo que se conoce como sistemas EUV, que permiten la producción de microchips cada vez más pequeños, eficientes y rápidos. Estos semiconductores de alto rendimiento son esenciales para el creciente uso de la IA y son descritos por los científicos de la Sociedad Fraunhofer en Múnich como "la nueva luz para la era digital". Los inversores también han reconocido la relevancia de ASML, lo que ha llevado a que la acción alcanzara un nuevo valor récord de 885,50 euros el martes.

Las opiniones de los analistas sobre el futuro desarrollo de la acción están divididas. Alexander Duval de Goldman Sachs cree que la acción aún ofrece potencial de crecimiento y podría alcanzar un objetivo de 980 euros en los próximos doce meses. Sandeep Deshpande de JP Morgan también predice un aumento a 950 euros. Otros analistas, tras el aumento del 30 por ciento desde principios de enero, anticipan una consolidación. UBS y Bernstein Research califican la acción como justamente valorada, mientras que Barclays la valora como neutral con un objetivo de 650 euros. El precio objetivo promedio de los analistas monitoreados por LSEG es de 880 euros. En general, la mayoría de los 35 analistas están convencidos por la acción de ASML, 26 recomiendan comprar y nueve aconsejan mantenerla actualmente.

ASML es imprescindible para la mayoría de los fabricantes de chips, ya que la empresa es líder mundial en algunos de los procesos clave de la producción de semiconductores. Entre sus clientes se encuentran Nvidia y gigantes del sector como TSMC e Intel. En la bolsa, ASML es por lo tanto la empresa de tecnología con la valoración más alta de Europa, con un valor de mercado actual de casi 350 mil millones de euros. Sin embargo, esto también hace que sus acciones sean relativamente caras, con una relación precio-beneficio de 42.

Durante la presentación de las cifras para el cuarto trimestre de 2023, el CEO Peter Wennink anunció que el año 2024 será un año de transición para ASML. La industria sigue estando en el punto más bajo del ciclo de inversión, pero el fuerte volumen de pedidos recibidos en el último trimestre apunta a una demanda futura. Con una cartera de pedidos de 39 mil millones de euros, de los cuales 9,2 mil millones de euros corresponden al cuarto trimestre, la empresa está bien posicionada. Para el año completo 2023, ASML reporta un ingreso neto de 27,6 mil millones de euros y un beneficio neto de 7,8 mil millones de euros. La previsión para 2024 es similar, pero la junta la califica de conservadora y se prepara para un crecimiento significativo en 2025.

Uno de los mayores riesgos para ASML es el negocio con China. Los Países Bajos ceden a la petición de EE. UU. de detener la importación de tecnologías clave en la economía china, lo que también afecta a ASML. Queda por ver si la demanda adicional de EE. UU. y otros países puede compensar o incluso sobrecompensar la pérdida en China. Sin embargo, la tendencia a localizar fábricas de chips en Norteamérica y Europa crea nuevas posibilidades de ingresos y beneficios para ASML. En particular, en la era emergente de la IA, se espera que la necesidad de microchips modernos siga aumentando. A largo plazo, por lo tanto, las acciones de ASML se consideran prometedoras - a pesar del riesgo existente con China.