Nestlé inicia un cambio estratégico fundamental bajo el nuevo CEO Laurent Freixe. En el marco de las cifras semestrales, el grupo suizo anunció una revisión de su cartera de vitaminas en EE.UU., en particular de las marcas principales Nature's Bounty y Puritan's Pride. Nestlé había adquirido ambas marcas en 2021 con la compra de Bountiful Co por 5,75 mil millones de dólares, ahora se considera una posible venta.
El paso marca un alejamiento de la estrategia de expansión bajo el predecesor Mark Schneider, quien quiso diversificar Nestlé con adquisiciones en nuevas categorías como suplementos de salud. Freixe, en cambio, prioriza el retorno a segmentos centrales rentables como alimentación para mascotas, café y nutrición médica.
Bereits zuvor hatte Freixe das europäische Wassergeschäft ausgegliedert und ein umfassendes Effizienzprogramm mit Einsparzielen von 2,8 Mrd. Dollar aufgesetzt. Nun soll auch das globale Supplementgeschäft auf Premiumlinien wie Garden of Life und Solgar fokussiert werden.
A pesar de un crecimiento orgánico de las ventas del 3 % en el primer semestre, el resultado operativo quedó por debajo de las expectativas. El valor decisivo del "real internal growth", es decir, el crecimiento en volumen de ventas, cayó un 0,4 %, lo que los analistas consideran como una consecuencia directa de los aumentos de precios en un entorno de mercado sensible a los precios. El aumento del margen operativo al 16,5 % (frente al 15,9 % esperado) no pudo calmar a los inversores decepcionados: el jueves, la acción cayó un 5 %.
Observadores del mercado como Jean-Philippe Bertschy de Vontobel acogen con satisfacción la nueva orientación, pero critican la intervención tardía. "Nestlé aparentemente esperó demasiado tiempo con la esperanza de que las marcas deficitarias pudieran girar más rápido". Según Bertschy, la venta de las dos marcas de vitaminas podría generar unos cientos de millones, valoradas con un múltiplo de 10 a 12.
Weitere Verkäufe dürften folgen. Bereits im Mai deutete Freixe an, sich von Geschäftsbereichen trennen zu wollen, in denen Nestlé „nicht in einer Position zum Gewinnen“ sei. Dazu zählt auch das US-Tiefkühl- und Fertiggerichte-Segment, das in der aktuellen Konsumzurückhaltung besonders leidet.