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TSMC bajo presión: los planes arancelarios de Trump amenazan el dominio de Taiwán en chips

TSMC está bajo presión: los aranceles de Trump amenazan la supremacía de Taiwán en chips y ponen en peligro inversiones de miles de millones en los EE. UU.

Eulerpool News 12 feb 2025, 7:12

Los planes arancelarios del presidente Donald Trump representan una grave amenaza para Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC). La empresa, que controla más de la mitad del mercado mundial de fabricación por encargo de semiconductores, se enfrenta a posibles aranceles de importación y la cancelación de subsidios multimillonarios.

Trump anunció a finales de enero que impondría nuevos aranceles a las importaciones extranjeras de chips y retiraría fondos gubernamentales para TSMC. Originalmente, EE. UU. había prometido 6.600 millones de dólares a la empresa para apoyar sus inversiones planificadas de 65.000 millones de dólares en nuevas instalaciones de producción en Arizona. "Se fueron a Taiwán, los queremos de vuelta", dijo Trump ante congresistas republicanos.

Taiwán reacciona alarmado. El gobierno allí envió a la viceministra de Economía, Cynthia Kiang, a Washington para hablar con representantes de EE. UU. sobre las consecuencias de las medidas planeadas. TSMC en paralelo debatía en Arizona sobre su estrategia. "Debemos acercar a nuestros amigos estadounidenses a las realidades económicas", dijo el ministro de Economía Kuo Jyh-huei.

Lo especialmente delicado es que Trump acusa a Taiwán y TSMC de depender del apoyo militar de EE. UU. sin ofrecer a cambio concesiones económicas. Su designado secretario de Comercio, Howard Lutnick, criticó que Taiwán ha alcanzado una posición demasiado fuerte debido a la dependencia de EE. UU. de sus semiconductores.

Los expertos consideran poco realista la reubicación de la producción en EE. UU.

Las primeras repercusiones de la política arancelaria ya se sienten: el fabricante de servidores taiwanés Quanta Computer y el contratista Foxconn están considerando trasladar la producción, después de que Trump anunciara a principios de febrero un arancel del 25 por ciento sobre las importaciones de Canadá y México. Medidas similares contra las importaciones de chips asiáticos podrían tener graves consecuencias.

TSMC se enfrenta a un dilema. Por un lado, la empresa quiere aferrarse a los subsidios estadounidenses para su fábrica en Arizona, pero por otro lado, un traslado demasiado fuerte de la producción sería económicamente arriesgado y políticamente difícil de justificar en Taiwán. La investigación y el desarrollo siguen siendo un punto crítico: TSMC atribuye su ventaja tecnológica a la estrecha integración de la investigación y la fabricación en Taiwán.

Una posible solución de compromiso podría ser acelerar la producción de tecnologías de chips más avanzadas en Estados Unidos. Hasta ahora, la primera fábrica en Arizona está diseñada para chips de 4 nanómetros, una generación detrás del estado de la técnica en Taiwán. TSMC planea trasladar la producción de 2 nanómetros a Estados Unidos en 2028 y abrir una tercera planta para 2030.

Además, las inversiones en la llamada tecnología de empaquetado avanzado, que es crucial para la fabricación de chips de última generación, podrían ayudar a apaciguar al gobierno de EE. UU. Esto fortalecería la ubicación en EE. UU., mientras Taiwán sigue siendo el centro de producción de semiconductores.

Letztlich wird es darauf ankommen, ob die US-Kunden von TSMC wie Apple und Nvidia Trump davon überzeugen können, auf drastische Zölle zu verzichten. „Sie wären die Hauptleidtragenden“, so Analyst Dan Nystedt.

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