Nach monatelanger Drohkulisse hat US-Präsident Donald Trump am Sonntag mit der EU einen Handelsdeal vereinbart, der einen 15-Prozent-Basistarif für europäische Güter wie Autos, Halbleiter und Pharmaerzeugnisse vorsieht. Im Gegenzug verpflichtete sich die EU zu Energieimporten aus den USA im Wert von 750 Mrd. Dollar sowie zu zusätzlichen Investitionen von 600 Mrd. Dollar in die US-Wirtschaft. Die Vereinbarung soll Klarheit für Unternehmen schaffen – die wirtschaftlichen Folgen bleiben jedoch erheblich.

Trump habló de un "gran acuerdo para ambas partes" después de reunirse con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en Turnberry. Von der Leyen calificó el paso como "lo mejor que pudimos lograr" y destacó la evasión de una posible guerra arancelaria en escalada. Hace apenas unas semanas, Washington había amenazado con aplicar aranceles del 30 por ciento a las exportaciones de la UE.

Mientras Trump mantiene los aranceles existentes sobre el acero y el aluminio en un 50%, se acordó una normativa de arancel cero para ciertos productos estratégicos como piezas de aviones, productos químicos o productos agrícolas. Los detalles completos del acuerdo se mantuvieron inicialmente en secreto, y las interpretaciones de ambas partes difieren significativamente en ciertos puntos.

Para las empresas, la tasa fija del 15% al menos ofrece previsibilidad. Analistas como Dmitry Grozoubinski de Aurora Macro Strategies destacan que estas tarifas no son bajas, pero tampoco son suficientes para perturbar masivamente los flujos comerciales mundiales. Sin embargo, afectarían las decisiones de inversión y aumentarían los precios al consumidor en EE. UU. a mediano plazo.

Die wirtschaftliche Bedeutung der Vereinbarung ist beträchtlich: Die EU ist der größte regionale Handelspartner der USA, mit einem täglichen bilateralen Handelsvolumen von über fünf Milliarden Dollar. Gleichzeitig ist Brüssel auch die wichtigste Quelle ausländischer Direktinvestitionen in die Vereinigten Staaten.

Para Alemania, cuya industria impulsada por las exportaciones depende en gran medida de relaciones comerciales estables con Estados Unidos, el acuerdo llega en el momento adecuado. Según Capital Economics, la tasa del 15% podría reducir el PIB alemán en alrededor de un 0,3%: pérdidas moderadas, pero sin un impacto estructural. Sin embargo, es probable que la industria automotriz alemana siga sufriendo bajo la presión de la política arancelaria.

Trump ha anunciado acuerdos similares con Japón, Vietnam, Filipinas e Indonesia, todos con aranceles base entre el 15 y el 20 %. Sin embargo, hasta ahora no se han publicado documentos oficiales sobre estos acuerdos. La UE había amenazado anteriormente con medidas de represalia que podrían haber afectado importaciones estadounidenses por valor de más de 100 mil millones de dólares.

Die Gespräche zwischen Trump und von der Leyen fanden unter intensiver Vorbereitung statt. Mientras la delegación de la UE se preparaba en un hotel de Glasgow para un mensaje coordinado, el comisario de comercio Maroš Šefčovič recibió el día anterior sugerencias tácticas de negociadores japoneses.

Die Einigung bringt kurzfristige Entlastung – doch sie markiert zugleich eine neue Handelsordnung, in der 15 % offenbar als globaler Standard etabliert werden sollen. Für Europa bedeutet das: Die Auseinandersetzung mit einem dauerhaft höheren Kostenniveau beginnt erst.